En su columna de esta semana el destacado escritor Edmundo Paz Soldán, se sumerge en el presente de la literatura japonesa, un presente nutrido de la gran tradición de autores, y sobre todo, de la gran y desconocida tradición de autoras japonesas que siguen influenciando la escritura del siglo XXI. Y en otra esquina, destaca el olvidado nombre del autor HARUO SATO y su obra EL PÁJARO DEMONÍACO, Satori Ediciones.
El presente de la literatura japonesa es diverso y potente, se apoya mucho en estos autores de ficción extraña e incluye a Yoko Tawada, Yoko Ogawa, Masatsugu Ono, Hiromi Kawakami, Sayaka Murata y Yukiko Motoya.
Meses atrás descubrí a Taeko Kono (1926-2015), una escritora japonesa que acaba de ser relanzada en los Estados Unidos por New Directions (todavía no traducida al español).
El libro se llamaba Toddler-Hunting, y el cuento de ese mismo título (1961), que podía traducirse como “La caza del niño”, trataba precisamente de eso: de la locura de una mujer llamada Akiko por los niños: “no sabía cuándo había comenzado su atracción por ellos, pero con cada año que transcurría la intoxicaba más su compañía. Últimamente, sus encuentros con niñitos le habían producido un intenso placer”. Akiko se dedica a comprar ropa para niños y luego busca la amistad de sus madres para regalarles la ropa. El cuento visita el fetichismo y la perversión más explícitos, convirtiendo a los niños en objetos eróticos, y explora una patología con impecable precisión psicológica realista y una prosa llena de matices.
FUENTE: DIARIO LA TERCERA / CULTO LA TERCERA